Los contratos de alquiler de vivienda, o contratos de arrendamiento, se llevan a cabo cuando el propietario de un inmueble pone éste a disposición de una parte interesada (arrendatario) a cambio de un pago o renta y por un tiempo determinado.

Cuando se formaliza un contrato de alquiler y pese a que la Ley de Arrendamientos Urbanos es de aplicación directa en determinados aspectos del contrato, es recomendable que todo esté regulado en el contrato de arrendamiento, ya que es el documento con el que las dos partes pueden hacer valer sus derechos en caso de conflicto.

¿Cuál es la duración de un contrato de alquiler de vivienda?

Con la entrada en vigor del Real Decreto-Ley 7/2019 se ha modificado, entre otros aspectos, la duración de los contratos de alquiler.

La Ley 29/1994, de Arrendamientos Urbanos, modificada por el anteriormente mencionado Real Decreto-Ley, establece una duración mínima:

  • La duración del arrendamiento será libremente pactada por las partes. Si esta fuera inferior a cinco años, o inferior a siete años si el arrendador fuese persona jurídica, llegado el día del vencimiento del contrato, éste se prorrogará obligatoriamente por plazos anuales hasta que el arrendamiento alcance una duración mínima de cinco años, o de siete años si el arrendador fuese persona jurídica, salvo que el arrendatario manifieste al arrendador, con treinta días de antelación como mínimo a la fecha de terminación del contrato o de cualquiera de las prórrogas, su voluntad de no renovarlo.

Con esta modificación se consigue una protección que antes no tenía el arrendatario, ya que se establece un mínimo de tiempo de alquiler (5 años o 7 años, dependiendo de si el propietario es persona física o persona jurídica), salvo que el arrendatario comunique su intención de no prorrogar el arrendamiento con 30 días de antelación a la fecha de finalización del contrato o de sus prórrogas.

Además, en los contratos sin duración determinada, se entenderán que éstos son de 1 año. En este caso, también el arrendatario deberá avisar con 30 días de antelación a la renovación del contrato de alquiler para darlo por finalizado.

¿Cómo debe ser un contrato de alquiler o arrendamiento?

El modelo de contrato de alquiler de vivienda o contrato de arrendamiento es un documento que debe seguir unas determinadas pautas, que son las siguientes:

  • Siempre se incluirán los datos personales de las dos partes, es decir, arrendador y arrendatario.
  • El inmueble debe estar correctamente identificado en el documento.
  • Debe especificar claramente la duración del contrato de alquiler, así como el pago o renta.
  • Deben estar expuestas todas las cláusulas que hayan acordado las dos partes.

El clausulado del contrato de alquiler debe ser entendible y claro para cualquier persona sin conocimientos jurídicos, a fin de evitar conflictos por no comprender adecuadamente cada una de las cláusulas.

¿Qué debes saber de la fianza en un contrato de alquiler?

En los contratos de alquiler, la fianza es un elemento común, y la ley establece que debe ser equivalente a una mensualidad de renta.

Otra medida de protección es que, durante los primeros 5 años (o durante los primeros 7 años si el arrendador es persona jurídica), no se podrá aumentar la fianza, aunque una vez superado dicho plazo el arrendador podrá aumentar la fianza requerida.

Esta fianza no queda en poder del arrendador, sino que la debe depositar en la institución oficial a la que le corresponde la gestión de la misma. Una vez el contrato de alquiler finaliza, la institución devolverá el importe de la fianza.

Una respuesta a “Contrato de alquiler de vivienda: todo lo que necesitas saber

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